Los elementos clave de la electrónica, como los semiconductores y los componentes de pantalla, se producen en «salas limpias», espacios donde se controlan las condiciones ambientales, incluida la presencia de polvo. Sin embargo, los trabajadores en estos espacios limpios y desinfectados a menudo están expuestos a sustancias químicas que son gravemente peligrosas para su salud. A diferencia de las catástrofes inmediatas, las enfermedades causadas por la acumulación de productos químicos suelen pasar desapercibidas y se desarrollan lentamente a lo largo de generaciones.

¿Qué era ese olor agridulce? ¿Significa «limpio» que solo se maximiza la estabilidad de la producción mientras se desatiende la seguridad del cuerpo? Irónicamente, son solo los recuerdos de los cuerpos y los leves olores de las sustancias que pasan por las salas limpias los que demuestran la toxicidad invisible y los peligros de estos sitios de tecnología de vanguardia.

Colorless, Odorless sigue los registros laborales y los materiales de archivo de las víctimas de los peligros biológicos de los semiconductores para rastrear los olores y acciones de las sustancias que las cámaras no pueden capturar. Para ello, se escuchan las voces de las mujeres asiáticas y trabajadoras migrantes, que son las más expuestas a esta vulnerabilidad. Los testimonios del pasado se superponen con los síntomas actuales, y el desastre se perpetúa en otros cuerpos y lugares. A medida que las corporaciones multinacionales trasladan las fábricas a países en desarrollo para reducir no solo los costos laborales, sino también los costos de implementación de estándares de seguridad y respuestas regulatorias, los desastres industriales ocurren a nivel global.

Quizás el futuro no es una proyección abstracta, sino algo entrelazado con cuerpos y materia específicos. A medida que las industrias de alta tecnología lideran el camino en la globalización del riesgo y la explotación en lugares de trabajo cada vez más externalizados, Colorless, Odorless intenta trazar el terreno de la solidaridad entre las víctimas, los activistas y los sindicatos de trabajadores frente a estos riesgos y explotaciones.