Cuando la Covid-19 se desató hace casi un año y medio nadie, incluso la artista Chen Qiulin, preveía que se convertiría en una pandemia global sin precedentes. El temor y la ansiedad que ha ocasionado la pandemia ha dado lugar a luchas y restricciones, poniendo de relieve conflictos y resistencias. En su proyecto experimental corporal in-situ, Drown (2021), Chen utiliza el tofu – un ingrediente tradicional de la gastronomía china y un símbolo cultural, de naturaleza frágil – como su medio creativo combinando instalaciones, performance corporal, creación de sonido en vivo, y salida de vídeo para resaltar la presencia humana de manera visual. 

Drown es una continuación de la exploración artística de Chen Qiulin del tofu como soporte para la creación artística que se remonta al año 2003. Como alimento oriental por antonomasia, el tofu representa las reflexiones de la artista respecto a su propia cultura e identidad. Inspirada por el proceso de elaboración del tofu, el gran molde de madera cubierto de tofu se convierte tanto en un escenario como una prisión para la artista, aludiendo a las restricciones geopolíticas de la actual pandemia global. Una protagonista femenina baila dentro del molde de madera a la vez que su cuerpo toca, se enreda y confronta al tofu escenificando una lucha trágica, cual ave con un ala rota que chilla al volar a contraviento. Las vocalizaciones y sonidos corporales desgarran la fragilidad y resistencia impotentes de manera penetrante, revelando la lucha y la vulnerabilidad ocultas desde una perspectiva femenina. 

A diferencia de las performances en solitario a las que Chen Qiulin nos tiene acostumbrados, Drown es una colaboración con la bailarina moderna Zheng Yuanyuan y del artista sonoro Chen Hongli. Esta performance renuncia a la habitual música de fondo para, en su lugar, captar y producir el sonido mediante una performance sonora en vivo en la que se invita al artista sonoro a utilizar su propio cuerpo para percibir los cambios dramáticos llevados a cabo por la bailarina, interactuar con el lenguaje corporal, improvisar con los sonidos que obtiene in situ y, eventualmente, componer el sonido holográfico para la obra de vídeo Drown.