La pregunta acerca de si la llamada del interior del bolsillo del pantalón fue coincidencia o predestinación y que nos pone en el lugar de la persona que recibe la llamada es una incógnita hasta el final careciendo, realmente, de importancia. Pocket Call de Spengemann urge al espectador a reflexionar sobre la tensión existente entre la viabilidad técnica y la oportunidad caótica. En su obra, Spengemann trabaja con temas que escapan a la reproducción técnica e industrial (p. ej. la propia vida, el universo o la casualidad) pero lo hace a través de medios hiper técnicos. Construye reproducciones de errores, conecta píxeles para hacer polígonos que se convierten luego en motas de polvo, hilos o pelusa que condensa en la oscura caverna del bolsillo del pantalón. De esta manera, el artista replantea la cuestión ontológica fundamental sobre la sustancia de la que realmente está hecha el mundo y cómo, desde esta perspectiva material, puede surgir algo nuevo, sin recurrir al esoterismo ni a la metafísica.